La presencia de grandes empresas españolas con inversiones en Brasil ha ido generando un importante
“efecto arrastre” sobre las pymes españolas.
Las empresas españolas han entendido el enorme atractivo del mercado brasileño y han convertido al gigante latinoamericano en uno de sus principales destinos de inversión. Los sectores “macro” que más oportunidades ofrecen para las empresas españolas son sin duda las infraestructuras y obras públicas, el sector inmobiliario y turístico, la producción y distribución de energía (incluidas las renovables), la alimentación y otros artículos de gran consumo.
Sin embargo, la implantación de empresas españolas en el país no se ha reducido a estos sectores, sino que ha abarcado muchas otras industrias. En base a nuestra experiencia podemos destacar la presencia de numerosas pymes trabajando ya en sectores como la alta cosmética, el calzado, la electrónica, la formación, los materiales de construcción, el medioambiente, la metalmecánica, así como textil, mueble y decoración en general.
Es necesario también destacar la buena imagen de España entre los brasileños. Nuestro país se considera parte de la Europa rica y su nombre está asociado a calidad, lo que facilita la entrada de inversiones y productos españoles aunque, a menudo, no estén acompañados por una política comercial adecuada para la realidad local (financiación, servicio de asistencia post-venta, almacén local, etc.).
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